
POEMITA
Tuve un pequeño pájaro
que cantaba para mí cada día
cuando el alma se estaba entumeciendo
y descarrió su vuelo.
Tuve una pequeña moneda de oro
hecha en los siglos anteriores
-y sin equivalente-
y la perdí en la arena.
En un lejano viaje
encontré una pequeña rosa -no corriente-
-sin con qué comparar-
pero otro peregrino la quebró de su tallo
y la prendió en su ojal.
¡Ah pequeña rosa
pequeño pájaro
pequeña moneda!
¡Qué fácil para alguien como yo morir!
Qué pensamiento tan dulce, qué comparación, pequeña rosa, pequeño pájaro, pequeña moneda, y yo quien soy? un pequeño ser que se morirá como la flor, arrancada la vida de un tirón.
ResponderEliminarGracias
Leonor.